Blogger Template by Blogcrowds.

Escribo bajo el pino centenario,
el que me acompañó hace unos meses
en la embestidura de mi corona de otoño perenne
(parece que el destino así lo quisiese)
huele a incertidumbre y miedo.
Siento que soy un fino e indefenso pétalo
que se marchita y no toca el suelo
pues se clava en la espina del tallo
que es la vida.
No puedo pensar que esto es una anécdota,
no soportaría ser un nombre en una lista
y pondré todo de mi parte para impedirlo.
Deseo pasear cogido de la mano,
tendré paciencia, estoy aprendiendo
a ser paciente, dentro de mi hay un pequeño
ser optimista que sonríes si tú sigues conmigo,
no importa el tiempo que tardemos en conseguirlo
pues será síntoma de que lo hemos recorridos juntos
y eso es lo único que vale la pena;
tenerme y que me tengas.
Vendrán días malos pero tu sinceridad nos sacará a flote,
es lo que más admiro de ti
aparte de tu valentía;
sé que puede flaquear por mi alter ego
pero terminaré domándolo, por los dos.
No merece la pena creer,
merece la pena ¡saber!
Saber que te amo,
saber que me amas.

0 Comments:

Post a Comment



Entrada más reciente Entrada antigua Inicio